miércoles, 18 de julio de 2007

Volvo V70

Volvo V70 - La versión Diesel de menor precio (V70 2.4D Kinetic) tiene un motor de 163 CV y cuesta 39.550 €. Salvo el Citroën C5 Break, no hay otro familiar Diesel entre 4,8 y 5,0 m y con una potencia de 155 a 175 CV que cueste menos que esa versión del V70 (relación de todos esos modelos).

El V70 tiene unas dimensiones próximas a las de modelos como un BMW Serie 5 Touring o un Saab 9-5 Wagon. De las cotas de habitabilidad, la mejor que tiene el V70 es la anchura, en las dos filas de asientos. En altura está dentro de lo normal en un familiar y el espacio longitudinal, aunque será suficiente en muchos casos, resulta escaso con relación a la longitud del coche.

El maletero tiene un hueco adicional bajo el suelo y varios accesorios, como ganchos laterales (imagen), una red que se puede colocar en varias posiciones a lo largo de unos rieles (imagen) o una plataforma que se desliza hacia fuera para facilitar la carga (imagen). El respaldo trasero está dividido en tres partes (40/20/40), que se pueden abatir independientemente.

Los airbags de cabeza también están pensados para proteger mejor a los niños; son 60 mm más grandes que en el anterior V70, por lo que descienden hasta el nivel donde los niños tienen la cabeza (más información sobre otros elementos de seguridad).

La gama de motores tiene inicialmente tres de gasolina y dos Diesel; el V70 estrena un motor turboalimentado de gasolina con 286 CV para la versión T6. Los dos Diesel tienen cinco cilindros y 2,4 l de cilindrada; se distinguen por la potencia máxima, 163 CV uno y 185 CV el otro.

De momento, Volvo no añadirá al V70 un Diesel de cuatro cilindros y 136 CV. Lo que sí está previsto es un gasolina de 145 CV que puede consumir carburante E85 (85 por ciento de etanol y 15 por ciento de gasolina).

Cualquier V70 tiene tracción delantera de serie salvo el T6, que tiene un sistema de tracción total conectable automáticamente. Más adelante habrá tracción total como opción para otras versiones de motor.

A diferencia del Volvo S80, el freno de estacionamiento es eléctrico en todas las versiones. Está disponible con 16 colores de pintura (dos de ellos nuevos), seis tipos de tapicería y tres colores interiores (negro, beis y rojo). Como el S80, el V70 pertenece a la familia de modelos en la que están el Ford S-Max o el Land Rover Freelander 2, y en la que está el Ford Mondeo 2007.

Hemos conducido las dos versiones con los motores más potentes de cada combustible: el D5, turbodiésel de 185 CV, y el T6, de gasolina con 286 CV. El Diesel no destaca por ser particularmente suave ni silencioso, aunque me ha parecido que transmitía menos vibraciones que cuando lo probamos en el S80. En marcha y a velocidad constante esto no es un problema, se nota sobre todo en ciudad o cuando se acelera intensamente.

El T6 es un motor progresivo en su respuesta, que empuja con fuerza a cualquier régimen hasta que se produce el corte de inyección (unas 6.600 rpm). Aunque no puedo dar una valoración objetiva como la que damos cuando probamos detenidamente un coche, el consumo de combustible no me ha parecido bajo.

El cambio me parece muy bueno por la suavidad con la que selecciona las marchas, tanto al acelerar como al reducir, aunque no destaca por la rapidez con que lo hace. Teóricamente, la versión T6 lleva una programación distinta, que favorece la velocidad de los cambios en detrimento de la suavidad; no he podido probarlo detenidamente como para afirmar si es así o no.

Según el manual, el ajuste que da mayor rigidez («Advance») se debe utilizar únicamente sobre firme en buen estado (hace al coche muy duro e incómodo si el asfalto es irregular).

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