Hyundai i30 2007

Hyundai i30 2007 - Como el KIA cee'd, tiene un gran espacio interior (más información del interior del cee'd), una acabado bueno y cualidades dinámicas satisfactorias. Como ocurre con el cee'd, un i30 es más recomendable por esas razones que otros modelos e independientemente de su precio. Es decir, puede ser más interesante que un Ford Focus o un Renault Mégane aunque su precio no sea muy inferior al de cualquiera de ellos.

Hay bolsas en las cuatro puertas, bolsas en los respaldos de los asientos delanteros, portagafas en el techo, reposabrazos central con un compartimento doble, tres portalatas y dos compartimentos con tapa en la consola central. Algunos de estos huecos van tapizados o tienen un fondo de plástico antideslizante.

El asiento trasero está dividido en proporciones 60/40, que se pueden abatir independientemente. Al abatirlos, quedan prácticamente enrasados con el fondo del maletero (imagen). De esta forma, el maletero tiene 1.250 l de capacidad.

De gasolina hay un 1,4 l de 109 CV, un 1,6 de 118 CV y un 2,0 l de 143 CV. Los Diesel son dos variantes de un 1,6 l (90 ó 116 CV) y un 2,0 l de 140 CV.

En el lanzamiento hay cuatro niveles de equipamiento: Classic, Comfort, Style y Premium. El primero no tiene aire acondicionado de serie ni puede tenerlo opcionalmente. Merece la pena escoger el segundo; cuesta 1.500 € más y tiene de serie tres elementos que faltan en el Classic: climatizador, volante y pomo forrados de cuero, y volante con ajuste horizontal y vertical.

En el equipamiento de serie del Comfort hay elementos como control de estabilidad, mandos de la radio en el volante, avisador de cinturón no abrochado en las cinco plazas (imagen), conexión para fuentes de sonido externas (imagen), reposacabezas activos, faros antiniebla, rueda de repuesto de la misma medida que las otras y ordenador.

El único elemento opcional en cualquier caso es la pintura metalizada; es decir, lo que no tiene de serie no lo puede tener opcionalmente. Entre los elementos que se pueden echar en falta están el navegador, los faros de xenón, las cerraduras automáticas o el arranque sin llave. El i30 es el primero de los modelos con la nueva denominación de Hyundai. Normalmente, cuando el nombre es una palabra, la idea es llamar la atención sobre el modelo; por el contrario, si se escoge una combinación de letras y números, lo que se quiere resaltar es la marca.

De momento, el i30 se fabrica en Corea. A partir de 2009, se fabricará en una planta que Hyundai está construyendo en la República Checa. Hyundai espera vender en España 14.000 unidades al año. Las cualidades dinámicas del Hyundai i30 son semejantes a las del KIA cee’d y —por tanto— muy satisfactorias. He conducido el i30 con el motor Diesel de 116 y me ha parecido que es suave y silencioso, que tiene fuerza en carretera y que no presenta el inconveniente principal del los Diesel en ciudad: falta de fuerza al iniciar la marcha.

Como ocurre en el cee’d, es posible que el ruido del motor sea excesivo si se circula de forma constante a una velocidad alta; es algo relativamente normal en un Diesel de esta cilindrada. La caja de seis velocidades que tiene la versión de 2,0 l le sentaría muy bien a esta de 1,6, cuya marcha más larga es ligeramente corta; da la velocidad máxima a 4.235 rpm, cuando el régimen de potencia máxima es 4.000 rpm. A 120 km/h en quinta, el motor gira a 2.700 rpm.

La estabilidad del i30 me parece muy satisfactoria y por encima de la media en coches de este tipo. El tacto de dirección es muy bueno, es de esas direcciones en las que da la impresión de que se aprecia claramente en volante las fuerzas que afectan a las ruedas. La unidad que he conducido tenía ruedas Kumho Solus KH15 de medida 205/55 16, que son los que lleva de serie la versión Style.

Además de que la estabilidad del i30 está por encima de la media, Hyundai ha tomado la acertada iniciativa de poner el control de estabilidad de serie en toda la gama. De esta manera, el i30 es uno de los modelos más recomendables de esta categoría por su seguridad activa.