miércoles, 4 de julio de 2007

Mitsubishi Colt 2004

Mitsubishi Colt 2004 - El Colt es un utilitario de 3.870 mm de longitud, 1695 mm de anchura y 1.550 mm de altura.

El Colt es 100 mm más bajo que un smart forfour (modelo con el que comparte muchos elementos estructurales y motores), y también es mucho más corto (mide 3.752 mm).

Tiene un asiento trasero plegable, con 15 mm de recorrido longitudinal y dividido en dos partes extraíbles independientemente (con proporciones 60/40). Son cómodos para manejar dentro del habitáculo pero pesados (sobre todo el de proporciones más grandes) para sacarlos y guardarlos fuera del coche.

Es un coche estable y seguro. La versión menos potente de gasolina tiene un motor muy bueno y aconsejable aunque solo sea de 1,1 l de cilindrada. Esta versión tiene el inconveniente de que no puede llevar control de estabilidad; todos los demás motores sí lo pueden tener (no desconectable), aunque no todos los niveles de equipamiento. Todos los motores (salvo el 1,5 litros, que no lo he probado) me han parecido algo ruidosos.

La versión 1,3 más económica también es mucho más barata que cualquiera de sus competidores, incluido el forfour. El punto negativo es que en su versión básica («Inform»), tampoco puede tener control de estabilidad y airbags laterales delanteros. Más información.

Más adelante tendrá motores Diesel de 1,5 litros de cilindrada con dos niveles de potencia, 68 y 95 CV de potencia. El de 95 CV de potencia llegará a finales de agosto de 2004 y el Diesel menos potente a principios de 2005.

El Colt mas económico (con motor 1,1 litros y equipamiento «Inform») está a la venta por 11.065 Euros. A esta versión sólo se le puede añadir como opción de fábrica el aire acondicionado (895 Euros). La versiones «Invite» con motor 1,1 tienen el aire de serie y únicamente se les puede añadir el «Pack Estilo» (588 Euros).

Las versiones 1,5 litros de gasolina tendrán un equipamiento superior «Instyle». Todos los «Instyle» pueden llevar cambio manual de seis velocidades o uno robotizado «Allshift» (con pares de engranajes y embrague monodisco). Las versiones con cambio robotizado tienen un consumo entre 0,2 y 0,3 litros menos que sus homólogos con cambio manual de cinco velocidades.

La estabilidad parece buena y tiene una acertada combinación entre dureza y contención de movimientos en curvas o en baches. No parece un coche ágil al estilo de un Ford Fusion o de un Mercedes Clase A (claramente más duros de suspensión), pero tampoco me ha parecido torpe. El Diesel de 95 CV me ha parecido un poco más subvirador que los de gasolina.

El 1,3 litros es un motor con el que hay que usar el cambio para notar una aceleración acorde con sus 95 CV de potencia. Su respuesta es mucho mejor a partir de 4.000 rpm. En carretera esta diferencia de prestaciones con respecto al 1,1 litros puede ser definitiva para mantener una velocidad alta por carreteras rápidas o salvar desniveles.

El motor Diesel de 95 CV de potencia también me ha parecido ruidoso al acelerar a fondo a baja velocidad. A velocidad alta, el sonido aerdonámico «tapa» el del motor. Sin embargo, no me ha parecido que vibre mucho. Desde el punto de vista de la respuesta a cualquier régimen me parece un motor excepcional.

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