
Con su sistema híbrido, Lexus ha hecho un sistema de propulsión mejor que el de cualquier otra berlina de este tipo, sea de gasolina o Diesel, desde el punto de vista del rendimiento y la suavidad de marcha.
Gasta menos que un BMW 535d -que tiene un motor Diesel de 272 CV- o un Mercedes-Benz E 420 CDI de 314 CV y acelera más que un Audi A6 4.2 V8, que tiene un motor de gasolina de 335 CV. Además, tiene una suavidad de marcha y unas emisiones más limpias que cualquiera de ellos.
Cuando el coche está detenido, el motor de gasolina se para (salvo en fase de calentamiento). Cuando el conductor inicia la marcha suavemente, el coche se impulsa con el motor eléctrico y la energía de la batería. Si el conductor demanda una aceleración más fuerte, se conecta el motor térmico aut

Al margen de esa notable ventaja en el sistema de propulsión, el GS 450h tiene otras cualidades que lo pueden hacer recomendable, como algunos elementos de equipamiento interesantes (también tiene otros que no lo son), una suspensión que lo hace cómodo para viajar y una calidad de ajuste buena.
Otro inconveniente puede ser la autonomía. Gasta muy poco en condiciones normales, pero puede gastar mucho si se usa a menudo toda su capacidad de aceleración; en esas condiciones, el depósito de 65 l de capacidad resulta escaso.
En España sólo se vende con equipamiento «President», que tiene de serie elementos como cristales hidrófugos en las puertas delanteras, alumbrado en curva, protección previa a la colisión, programador de velocidad activo, cerraduras automáticas y arranque sin llave, tapicería de cuero, asientos delanteros con calefacción y ventilac

Le falta un freno de estacionamiento automático o, por lo menos, con un mando eléctrico. El que tiene es de pedal, incómodo y poco refinado.
Lexus espera vender este año 165 unidades del GS 450h; no está previsto un GS con motor Diesel de esta potencia, que no tendría ninguna ventaja sobre el modelo híbrido y sí algunos inconvenientes.
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