Hyundai Accent 3p 1.4 DOHC

Hyundai Accent 3p 1.4 DOHC - Junto con el Ibiza 3p 1.4 16V 100 CV Reference, el Accent es el más barato dentro de los coches que tienen carrocería de tres puertas, un motor entorno a 100 CV y un longitud de unos 4,0 m. Los que son más baratos son menos potentes (como el Clio 1.2 de 75 CV) o más pequeños (como el Chevrolet Kalos 1.4 16 V de 94 CV).

El Ibiza tiene más equipamiento opcional: puede tener control de estabilidad, programador de velocidad, mandos de la radio en el volante, faros antiniebla o alarma, entre otros elementos. Las únicas opciones montadas en fábrica que puede tener el Accent son pintura metalizada, aire acondicionado y conexión para teléfono Bluetooth.

Tiene un motor de gasolina que es suave y —generalmente— silencioso. Su capacidad de aceleración es similar al de otros coches de su tamaño y potencia y puede tener un consumo de gasolina normalmente bajo.

La mayor parte de los recubrimientos del interior dan una buena sensación, sin llegar a ser un coche refinado. Hay cosas que no dan un resultado grato del todo, como los asientos delanteros (que sujetan poco) o ciertos plásticos de las puertas (que se arañan con facilidad). No todos los mandos están bien situados, ni a la vista del conductor (como los mandos de antinieblas o la regulación en altura de las luces).

El Accent se vende con carrocería de tres o de cuatro puertas. El de cuatro puertas tiene una carrocería de estilo distinto a la de tres: tiene tres volúmenes y tapa para el maletero, en lugar del portón que tiene el de tres.

En términos generales, el Accent tiene un interior agradable y ciertos detalles que lo hacen funcional para lo normal en una carrocería de tres puertas. También hay cosas mejorables como los asientos delanteros (que recogen poco el cuerpo lateralmente) y ciertos plásticos de las puertas que tienen tendencia a rayarse al roce con objetos duros.

Hay muchos huecos donde dejar objetos de distintos tamaños. Algunos de estos huecos tienen una tapizado de goma (para que no hagan ruido los objetos ahí depositados), que no tienen todos los coches de este tamaño ni algunos de precio superior.

A pesar de que el volante no tiene regulación longitudinal (sólo en altura), yo me he sentido cómodo. Por cómo va colocado (relativamente separado el salpicadero y a una distancia adecuada de los pedales), esta carencia se echa menos en falta que otros coches que tampoco tienen este tipo de regulación.

El Accent no da la sensación de espacio que dan otros coches modernos (como un Grande Punto o un Corsa); la base del parabrisas no queda muy lejos, ni el techo particularmente alto. No obstante, delante no falta espacio para dos ocupantes de una talla normal o por encima de la media.

En las plazas traseras hay dos detalles cómodos: uno, es que justo detrás del asiento del conductor y en la base, hay un pedal para que al pisarlo, abate el respaldo y echa el asiento hacia delante. Otro aspecto interesante de las plazas traseras es que el respaldo tiene una regulación en inclinación en dos posiciones.