
Otra ventaja del Outlander con el motor Diesel más potente es que hace mucho menos ruido que el de 140 CV. Por una parte, el ruido del motor es menor de por sí (no hay diferencia en el aislamiento). Por otra los desarrollos de transmisión más largos; a 120 km/h en sexta velocidad, el motor del 140 CV gira a más de 2.500 rpm; el de 156 lo hace a menos de 2.300 rpm. Además del precio, un inconveniente de la versión de 156 CV es que —por tener el equipamiento más abundante— lleva de serie las llantas de 18" (con neumáticos 225/55). Incluso con esas ruedas es cómodo, pero estaría mejor equipado para circular por caminos son mas perfil de neumático y una llanta de menor diámetro.
Para circular fuera de carretera se puede seleccionar el modo de tracción total normal o el modo «Lock». El primero es suficiente para condiciones normales, incluidas las zonas de barro donde la rueda no se hunda ni haya rampas empinadas. El segundo es adecuado para esos casos y se desconecta automáticamente a partir de 40 km/h (información técnica sobre el sistema de tracción total).
Su altura y pe

Otro elemento interesante que tienen todos los Outlander es un mecanismo eléctrico que, actuando sobre dos mandos que hay en el maletero, abate los respaldos y bascula todo el asiento hacia delante. Para que el sistema funcione correctamente, una de las dos puertas traseras tiene que estar abierta (como medida de seguridad) y, generalmente, los asientos del conductor y acompañante no pueden estar en la posición más retrasada posible (porque si no, los traseros rozan contra los delanteros al abatirlos). Para volverlos a colocar en su sitio hay que hacerlo a mano.
Las plazas delanteras son las mejores del coche. Los asientos tienen un mullido blando que no será del gusto del todo el mundo, pero sujetan suficientemente bien el cuerpo de los ocupantes. La posición de conducción es cómoda, aunque se echa en falta que el volante tenga doble ajuste (sólo tiene en altura). Los asientos traseros (o de la segunda fila, si está instalada la tercera) tienen una banqueta y un respaldo prácticamente plano, que no sujeta nada el cuerpo. Aunque la carrocería no es estrecha, la configuración de la banqueta traser

En el Outlander, el techo está fabricado en aluminio, es 5 kg más ligero que un techo normal de chapa de acero y por tanto baja un poco el centro de gravedad. La fuerza que reciben las ruedas traseras se transmite a través de un juego de discos intercalados. Este sistema embraga o desembraga los discos entre sí en función de las condiciones de adherencia, si está conectada la función 4WD del mando de la consola (en la posición 2WD el Outlander es un tracción delantera). A medida que aumenta la presión entre los discos, aumenta la fuerza que reciben las ruedas posteriores.